El bonsái es una planta muy común en los hogares y se caracteriza por su particular forma: parece un árbol en miniatura.

Los bonsáis, sin embargo, también son plantas muy delicadas y necesitan cuidados y atención específicos para crecer de la mejor manera.

Así que veamos qué precauciones tener en cuenta en el cuidado del bonsái.

  1. Luz : el bonsái es una planta que necesita luz directa, por lo que debe colocarse en un lugar cálido. También puede estar al aire libre durante el verano.
  2. Agua: es necesario regar el bonsái una vez cada 3 días. En la estación más calurosa, puedes rociar las hojas incluso todos los días para refrescarlas. Pero cuidado con el exceso de agua: podría pudrirse.
  3. Florero : puede parecer una obviedad pero el recipiente que alberga la planta es un factor fundamental. Elige el recipiente que se ajuste perfectamente al tamaño de la planta, y cámbialo según su crecimiento.
  4. Poda: además de dar una forma ordenada a la planta, la poda también sirve para cuidar la propia planta. Corta los brotes con cuidado y cuidado.